La teoría ética aristotélica, expresada en su "Ética a Nicómaco", es eudemonista y teleológica, es decir, se basa en la felicidad y la
finalidad. Para Aristóteles
felicidad esta intrínsecamente unida a la finalidad.
Pongamos un ejemplo para aclarar esta
cuestión: Imaginemos un bolígrafo, ¿cual es la finalidad propia de un bolígrafo?
Su finalidad es claramente escribir. Si este bolígrafo tuviese toda la tinta y pudiese hablar diría "soy feliz ya que puedo realizar aquello para lo que
existo", sin embargo, si el bolígrafo no tuviese tinta, no podría realizar su finalidad propia y sería infeliz puesto que lo utilizarían con un propósito diferente al que verdaderamente tiene ese bolígrafo o directamente no sería usado.
En este punto una duda nos asalta ¿Y cuál es la finalidad propia del ser humano? Aristóteles dice que la finalidad propia del hombre es la contemplación, el uso de la racionalidad.
En este punto una duda nos asalta ¿Y cuál es la finalidad propia del ser humano? Aristóteles dice que la finalidad propia del hombre es la contemplación, el uso de la racionalidad.
Siendo esta la finalidad del hombre, y por consiguiente su forma de ser feliz, ¿cómo podemos pretender que un país con más de 6
millones de parados tengan una finalidad? ¿No será este el motivo de su
descontento, de su tristeza y malestar?
En la actualidad, millones de estudiantes prodigiosos acaban trabajando de camareros, por lo que la mayoría se ven forzados a dejar España, ya que aquí no pueden realizar su finalidad propia. Comparando con el ejemplo de los bolígrafos, un licenciado en cualquier carrera es un bolígrafo con la tinta llena y dispuesto a escribir pero no tiene papel donde realizarlo, por lo que tiene dos opciones: buscar un papel fuera o quedarse y ser utilizado erróneamente.
Todo este cumulo de frustraciones y tristeza, producido por la no realización de su finalidad, desemboca en manifestaciones más o menos lícitas de descontento, ya sean manifestaciones o huelgas legales, ya sean escraches o manifestaciones ilegales.
La finalidad del ser humano es la de cultivar la racionalidad. Sin embargo,¿Esto puede haber cambiando en la sociedad de ahora? habrá algunos cuyos principios sean esos mismos, pero, en cambio, habrá otros que no quieran ser felices puesto que su objetivo en la vida no va mas allá ni del presente ni de un perfeccionamiento de la racionalidad, ¿pueden ser esos mismos quienes realizan este tipo de actividades violentas?
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